febrero 20, 2008

Gratitud

El sentir de un alma desconsolada puede encontrar esperanza y amor sin la necesidad de llegar al final del camino, siempre y cuando se vive con la disponibilidad de quererlo. Recibir esto no es fácil, ya que no cualquier persona esta dispuesta a darlo. Percibir el consuelo sobre tu pecho después de que la pena embriague tu espíritu da la fuerza para continuar caminando por los senderos que durante la vida habrás de recorrer.


He recibido aquel sentir, de un alma bondadosa y caritativa que se compadeciera de la mía y que abriera sus humildes y hermosas alas para cobijar la desesperación y la vergüenza de las mías, que desnudara el sentimiento del dolor y lo cambiara de la suplica de un nuevo día, y hoy lo quiero agradecer.


Solo esa palabra tengo en mi boca y en mi ser: Gracias. Por darme la esperanza de continuar adelante, por que el reflejo de tu inmortal silueta me de la fuerza para poder levantarme después de caído, por que la belleza de tus ojos abrigara cada rastro de mi dolor profundo y lo limpiara con la luz del sol, por otorgarme la bendición que para mi representa recibir todo lo que me has otorgado. Gracias.


Prometo con toda mi fuerza que algún día te lo retribuiré, y cuando el alba de la desesperación acune tus noches de desvelo, estaré ahí para pagarte todo lo que me has dado...

1 comentario:

Walter Castle dijo...

mannnn regreseee ahora full foro xD ya nos vemos ahiii